Instituto de

Gustoterapia

Desde pequeña, Sandra no comía para fastidiar a su madre. Se dejaba el almuerzo en la casa para que ella se pasara el día preocupada. El motivo es que Sandra sentía que su madre le había herido.

La madre, muy preocupada, le proponía insistentemente acudir al médico y hacerse revisiones. Pero todas las pruebas salían bien. Ni problemas de anemia, ni escasez de defensas… Nada.

Sandra comenzó a comer exclusivamente galletitas integrales y yogourt. Su peso bajó de 54 a 45kg.

La madre le decía a todo el mundo que ella no comía A los profesores, a los familiares. Siempre contaba la misma historia.

No fue hasta la etapa universitaria que Sandra comenzó a enfermar.

Este es sólo el comienzo de esta historia, basada en un tratamiento real, que os iremos contando poco a poco. Pero ya con esta pequeña introducción podemos hacernos una idea de cómo la alimentación afecta el área emocional de las personas.